…por ejemplo acabo de ver un pato que nadaba en uno de los lagos del Bois de Boulogne, y era de una hermosura tan maravillosa que no pude menos que ponerme en cuclillas junto al lago y quedarme no sé cuánto tiempo mirando su hermosura, la alegría petulante de sus ojos, esa doble línea delicada que corta su pecho en el agua del lago y que se va abriendo hasta perderse en la distancia. Mi entusiasmo no nace solamente del pato, es algo que el pato cuaja de golpe, porque a veces puede ser una hoja seca que se balancea en el borde de un banco, o una grúa anaranjada, enormísima y delicada contra el cielo azul de la tarde …
Julio Cortázar
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me gustó el pelo de la 1era, la sirena en la 2da y el movimiento en la 3era...
ResponderEliminarla mujer es belleza... salu2...
..."la mujer es belleza", qué lindo eso JLO.
EliminarSaludos, gracias por pasar.
Pensándolo bien la mujer no está en la ventana sino junto a ella. Podría decirse incluso de otro modo. Es la mujer la ventana. Y a través de ella -sirena o dama semidesnuda- vemos el mundo más claramente que a través de la ventana. De última no importa tanto lo que se ve sino cómo se lo ve. Luis. De Suspende resucitado.
ResponderEliminarSí, son mujeres "junto a" y no "en" la ventana, pero me gustó jugar con la ambigüedad de este título. Aunque vos fuiste mucho más lejos-y más bello- con tu mujer-ventana.
EliminarUn beso, Luis nuevamenteenviaje :)
Anduviste mirando para arriba y encontraste estas maravillosas habitantes de la ciudad.
ResponderEliminar¡Que siga los paseos en estos lindos días de verano, Betina!
Que sigan, sí!... Los días largos, la luna llena de hoy, la brisa de las 7 de la tarde, los paseos y tanto tanto por mirar (para arriba, para abajo, ¡no hay que perderse nada!)
EliminarUn abrazo grande, Eleonora
Muy lindos dibujos, pero ¿sabe qué me llama la atención...? El entusiasmo que han tenido esos jóvenes para pintar eso... Hay que subirse a un andamio y no era la Capilla Sixtina....Disculpe mi amarga objetividad.
ResponderEliminarSu mérito (el suyo) es indudable pero le va a quedar cogote de yesero...
Y no sé qué plantas eran.
Bueno, a mí también me llama la atención, pero motivos muy diferentes de los suyos. Yo aprecio mucho el arte callejero y la tarea de esos artistas que trabajan casi en secreto, que trasladan sus pinceles, aerosoles, latas de pintura y escaleras para dejarnos el regalo de sus obras.
EliminarY por mi cogote no se preocupe que, para compensar, también ando mirando el suelo, no crea.
Saludos, estimado.
La primera, sobre todo, es preciosa.
ResponderEliminarUn beso, Betina.
Sí, también me gusta mucho... el contraste entre los colores de la mujer y el negro de la ventana...
EliminarUn beso, Carmela, gracias por pasar.
Quería sugerirte un motivo para que vayas con tu camarita y fotografíes, querida Betina. Queda en la esquina de Sarmiento y Manuel de Anchorena. Cerca de Once, de Almagro, por ahí. Alguien pintó algo arriba de una ventana. Justo en la esquina. Va a gustarte y encima como tenés una hermosa mirada harás una hermosa foto que yo quisiera guardar para siempre. ¿Qué edad tenés? A veces pienso que tenés cien años o más. A veces veinte o menos. Sos un misterio en color ámbar. Un beso grande desde Suspende en extinción.
ResponderEliminarMuchas gracias por la sugerencia, Luis, la voy a tener en cuenta.
Eliminar¿Edad? Como todos. A veces 100 o más, a veces 20 o menos.
Como todos, un misterio.
Beso grande (y ya sabés que, por suerte, no creo en la extición de suspende...)