…por ejemplo acabo de ver un pato que nadaba en uno de los lagos del Bois de Boulogne, y era de una hermosura tan maravillosa que no pude menos que ponerme en cuclillas junto al lago y quedarme no sé cuánto tiempo mirando su hermosura, la alegría petulante de sus ojos, esa doble línea delicada que corta su pecho en el agua del lago y que se va abriendo hasta perderse en la distancia. Mi entusiasmo no nace solamente del pato, es algo que el pato cuaja de golpe, porque a veces puede ser una hoja seca que se balancea en el borde de un banco, o una grúa anaranjada, enormísima y delicada contra el cielo azul de la tarde …
Julio Cortázar
28 de septiembre de 2012
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
¡Qué hermosuraaaa!
ResponderEliminarAdemás, el azul es mi color favorito :)
un beso
Varias veces escuché a los extranjeros que nos visitan elogiar el cielo tan azul de Buenos Aires (y de Argentina en general). No conozco demasiados cielos, pero es verdad que el nuestro suele regalarnos azules muy hermosos.
Eliminar¿Le gusta el de la foto? Se lo regalo!
Besos, conde.
Betina! esa canción me la cantaba mi mamá cuando yo era muy chica (hace muuuucho tiempo) Hermosa foto con un azul de cielo y flores encantador.
ResponderEliminarUn beso
Ja! Yo también la escuché alguna vez cuando era chica (hace miles de años... o ayer, según cómo se sienta uno :)
EliminarGracias, Lau, un beso!
¿Cómo se llama la flor de la foto??? Justo el otro día la vi y me di cuenta de que no me acordaba cómo la llamamos en Argentina (es que acá todo lo llaman diferente).
ResponderEliminarSi no me equivoco, es un jazmín del cielo.
Eliminar