…por ejemplo acabo de ver un pato que nadaba en uno de los lagos del Bois de Boulogne, y era de una hermosura tan maravillosa que no pude menos que ponerme en cuclillas junto al lago y quedarme no sé cuánto tiempo mirando su hermosura, la alegría petulante de sus ojos, esa doble línea delicada que corta su pecho en el agua del lago y que se va abriendo hasta perderse en la distancia. Mi entusiasmo no nace solamente del pato, es algo que el pato cuaja de golpe, porque a veces puede ser una hoja seca que se balancea en el borde de un banco, o una grúa anaranjada, enormísima y delicada contra el cielo azul de la tarde …

Julio Cortázar

3 de marzo de 2013

Flores en el cielo





6 comentarios:

  1. Una guirnalda de flores en el cielo!
    Preciosa!

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    1. Gracias!
      Preciosuras que podemos disfrutar simplemente levantando la vista, en el momento oportuno. Tan lindas, sí...

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  2. Si bien las santa rita son muy fotogénicas, hay que reconocer también que la toma es magnífica.
    Me encanta la iluminación.
    Besos.

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    1. Gracias, T. El celeste celestísimo del cielo y el fucsia de la santa rita daban una suma muy hermosa. Pero como señalás, la luz fue decisiva. El sol del atardecer se reflejaba en las flores de un modo tan especial que parecían incandescentes, como si tuvieran luz propia.

      Besos

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  3. Es una Santa Rita como la mía, sin embargo el recorte de tu mirada la volvió mágica.

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    1. Yo también tengo una Santa Rita, pero blanca.

      Gracias por el elogio, Eleonora! Pero creo que mi mérito, quizás, fue estar atenta a esa magia breve que ocurría por sí sola...


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